Seguramente estás leyendo este artículo porque has intentado hacer fotos en la nieve y muchas veces no has conseguido el resultado que esperabas.
No te preocupes, porque es posible sacar fotos espectaculares de paisajes nevados siguiendo algunos consejos básicos. Sigue leyendo porque con estas recomendaciones vas a conseguir fotografías espectaculares con la nieve como protagonista.
Compensa la Exposición: Clave en la Nieve
A pesar de los sofisticados modos de medición que poseen hasta las mejores cámaras, la fotografía en la nieve resulta demasiado exigente debido a sus extremas condiciones de contraste.
Esto se debe a que la nieve refleja la luz con mucha intensidad, como si fuera un reflector gigante. Por tanto, el éxito de una buena fotografía en la nieve depende, mayormente, de aplicar la correcta compensación en la exposición.
Si disparas en modo automático, te darás cuenta de que la nieve saldrá gris, en lugar de blanca. Esto ocurre debido a que el fotómetro de la cámara reacciona ante la luz tan potente que refleja la nieve cerrando el diafragma, para lograr encontrar una exposición correcta. Buscará un tono medio entre tanto blanco brillante y tendrá tendencia a la subexposición.
Si tu cámara dispone de un 'modo nieve' automático puedes seleccionarlo. Si no es así, la solución consiste en sobreexponer la imagen uno o dos pasos. ¿Cómo hago esto? Con el botón de compensación de la exposición. Casi todas las cámaras lo tienen y está diseñado para estos casos.
Si en lugar de querer fotografiar el paisaje, pretendes fotografiar una persona o un objeto, puedes cambiar el modo de medición de la cámara al modo ponderado al centro o puntual, para medir solo la luz que llega al sujeto. Es una forma de asegurarte de que el objeto fotografiado está expuesto de forma correcta y de que la nieve de fondo aparece más blanca.
Si ves que aún así quedan sombras acusadas en el rostro, no está de más usar un flash de relleno para compensar las zonas más oscuras. Pero ¡ojo con el flash! si lo proyectas sobre la nieve, siendo un elemento de por sí tan luminoso, sólo conseguirás obtener un mal resultado.
Haz Balance de Blancos y Comprueba el Histograma
Hacer un correcto balance de blancos en la nieve puede parecerte misión imposible, pero no lo es. Si apreciamos que la nieve tiene un tono azulado es porque el ajuste automático no está haciendo una correcta interpretación. Si tu cámara no dispone de un modo nieve automático, tendrás que ajustar el balance de blancos manualmente.
Recuerda que cuanto más alto sea el número (grados Kelvin) más fría y azulada se verá la captura. Sin embargo, cuanto menor sea el número más cálida y anaranjada aparecerá, por lo que deberás encontrar ese equilibrio consiguiendo un tono intermedio.
Confía también en la lectura de tu Histograma. Seguramente no puedas ver bien del todo la pantalla LCD de tu cámara o que te refleje la luz en ella. No te compliques, accede al histograma para medir la escena correctamente y asegurarte de que tus fotos están bien realizadas.
Si la nieve crea un efecto muy reflectante, también puedes evitar reflejos innecesarios en la lente usando un parasol en el objetivo. Puedes usar un filtro polarizador para oscurecer un cielo brillante o ayudar a incrementar la saturación.
Usa el Formato RAW: Especialmente en la Nieve
Si tu cámara lo permite, es mejor que dispares tus fotografías en formato RAW. Esto te dará mucha mayor flexibilidad en la postproducción de tus imágenes y será mucho más fácil corregir cualquier problema con la intensidad de la luz o el color (podrás, por ejemplo, corregir más fácilmente los tonos azulados si no hiciste un buen balance de blancos). Usando el formato JPEG será mucho más complicado o incluso imposible corregir los fallos de una fotografía hecha en la nieve.
En el postprocesado, verás que puedes corregir fallos como la iluminación o borrar sin dificultad restos de suciedad, hierba, huellas o cualquier elemento que desvíe la atención dentro de tu composición. No te olvides de corregir ajustes como el contraste y el color para que tu fotografía esté del todo perfecta.
Ten en cuenta, eso sí, que si fotografías en formato RAW el tamaño de los archivos, al registrar muchos más datos, será mucho más grande. Deberás llevar tarjetas de memoria adicionales o de gran capacidad para no quedarte sin memoria rápidamente.
Aumenta la Velocidad de Obturación
Una de las fotos más buscadas es siempre la de la caída de la nieve, pero no es fácil captar esos esponjosos copos detenidos por completo. Si quieres que salgan nítidos, tendrás que utilizar una velocidad de obturación relativamente rápida.
Ten en cuenta que la nieve cae más rápido de lo que crees y si tu velocidad de obturación es lenta aparecerá con falta de definición o como una cortina blanca borrosa. Congelar la nieve (nunca mejor dicho) en tu captura es posible utilizando, por ejemplo, una velocidad de entre 1/250 y 1/500. Si lo haces con un fondo oscuro, todavía se verán mejor.
Si, por lo contrario, quieres que la nieve que está cayendo desaparezca y que no te arruine el paisaje también puedes hacer magia. Si hay copos que caen cerca de tu cámara es cierto que pueden fastidiar tu encuadre y, por ende, tu captura. Lo que debes hacer es montar la cámara en un trípode, disminuir la ISO, aumentar la apertura y disparar con una velocidad de obturación baja (cuanto más mejor). Así los copos de nieve no tendrán tiempo suficiente de ser capturados por la cámara y desaparecerán de la foto. ¡Pruébalo!
¿Qué Debes Tener en Cuenta para Fotografiar la Nieve?
Elige un Día Nublado
No esperes a que salga el sol para ir a la nieve a tomar fotos, en este caso no es lo más recomendable. Suele ser mejor idea que escojas un día nublado para crear preciosas escenas invernales.
Si te atreves a realizar tu expedición fotográfica bajo una espesa niebla o una tormenta de nieve, además de suponer un reto, no hay duda de que conseguirás fotografías más espectaculares que las típicas de un día soleado con el cielo azul.
Prueba a realizar tus fotografías en la nieve a primeras o a últimas horas del día. Así evitarás la dura luz del sol rebotando en la nieve durante el resto de horas.
Como ya sabes, si el sol se encuentra en un ángulo bajo, tendrás mayor contraste en las fotos y una luz suave de amanecer o atardecer suele ser más embellecedora.
Busca la Nieve Virgen
Un error muy típico es que dejemos marcas sobre el paisaje que queremos fotografiar y luego ya sea tarde para no sacarlas en nuestra foto. A no ser que la intención de tu fotografía sea captar tus huellas dentro de la composición, te aconsejo que lo tengas en cuenta.
Busca fotografiar la nieve a las primeras horas del día, cuando la nieve es más virgen y hay menos probabilidad de que haya sido profanada por huellas de animales, personas o vehículos. Un paseo sobre las 7.00 am, antes de que amanezca, y después de una noche de nevada es una experiencia fotográfica muy gratificante. Abrígate bien y sal a captar ese rocío matinal congelado que lo rodeará todo y que te fascinará.
Cuida Bien tu Equipo
Las condiciones meteorológicas en este tipo de fotografía, no son las mejores para nuestras cámaras, eso es cierto. Por eso es muy importante que cuidemos bien el equipo que llevemos a nuestra salida fotográfica y tengamos en cuenta cómo le puede afectar un cambio brusco de temperatura. Lo primero es que saques la cámara y dejes que se 'aclimate un poco'. No te pongas a hacer fotos en seguida. Espera unos minutos para que asimile esas nuevas condiciones ambientales.
Intenta mantener la tapa puesta siempre que la cámara no esté en uso para evitar que caiga o salpique nieve en la lente. Si ves que se empaña no soples aire caliente sobre ella, si no podría crearse una fina capa de hielo sobre la lente. Utiliza únicamente un paño de microfibra para limpiarla.
Otra opción es que uses un filtro UV para proteger la lente principal de la humedad. No es infalible pero siempre ayudará a proteger más la parte frontal de tu objetivo. Por otro lado, contén la respiración al hacer tus fotos y no empañar tampoco la pantalla LCD o el visor.
Si está nevando o lloviendo intensamente tal vez sea mejor esperar y salir a hacer fotos cuando el tiempo mejore. Someter la cámara o tu objetivo a esas condiciones es un riesgo. Existen fundas de lluvia específicas para cámaras réflex o incluso protectores para que estén más a salvo. No te la juegues.
Es muy importante que tengas claro qué objetivo te vas a llevar. Muchos fotógrafos prefieren focales fijas por su mejor rendimiento, pero si vas a la nieve vas a tener que elegir. O bien usas la misma focal durante todo el día o utilizas un objetivo con zoom con diversas distancias focales. Lo que debes asumir es que cambiar el objetivo al aire libre en esas condiciones supondrá un alto riesgo de condensación que podría perjudicar gravemente tu cámara. Piensa que quedará totalmente desprotegida durante los segundos que tardes en cambiar la lente.
No te olvides de llevar baterías de repuesto. Bajo condiciones de este tipo el rendimiento de las baterías suele verse afectado y se descargan antes, por lo que llévalas bien cargadas y lo más cerca de tu cuerpo posible. El calor corporal que tú desprendas las mantendrán a una buena temperatura, se conservarán mejor y te durarán más.
Lleva la Vestimenta Apropiada: Protégete de la Nieve
Como es obvio, cuando vas a la nieve debes ir muy bien preparado. Igual que tu cámara. Además de unas buenas botas impermeables es importante que vayas bien abrigado, pero sin excederte. Si te abrigas demasiado es peor que si sientes un poco de frío, piensa que la sudoración interna si se enfría, podría causarte una hipotermia.
Lleva contigo gafas de sol: te vendrán bien para evitar el molesto reflejo de la luz en la nieve. En cuanto a tus manos, también debes protegerlas del frío. Aunque no demasiado, ya que las necesitarás para configurar y sujetar con firmeza tu cámara.
En este caso te aconsejo que utilices guantes térmicos que sean finos o unos mitones, que dejarán al aire tus dedos y con los que te resultará más fácil manejar los diales y botones de tu cámara. También puedes hacerte con calienta manos instantáneos desechables, muy utilizados por los deportistas, para ir calentando tus manos y mantenerlas a la temperatura ideal.
¿Cómo Conseguir Buenas Composiciones en la Nieve?
Realizar fotos en la nieve resulta muy motivador. Hay vistas realmente espectaculares que seguro que quieres captar en tus fotografías. Pero también hay trucos que puedes utilizar para conseguir composiciones muy buenas en la nieve.
Incluye Varios Elementos dentro del Paisaje
Lo más importante es que no te limites a encuadrar solo nieve, ya que puede resultar un poco soso si hay demasiado espacio en blanco y nada más. Busca algo que rompa con el paisaje uniforme, como un camino, un árbol, una roca o una estalactita que genere un poco de contraste y le de vida a tu captura.
Teniendo en cuenta la regla de los tercios, intenta dar vida a tu imagen. Prueba a colocar elementos en el horizonte o en primer plano, busca generar interés en la imagen que vaya más allá del paisaje nevado.
Juega con Colores Vibrantes
Si algo destaca en la nieve, sin duda es otro color. Uno de los trucos más utilizados para la fotografía en la nieve es el uso de un elemento que añada un toque de color vibrante a la escena.
Añadir un punto localizado de color rojo intenso, por ejemplo, captará toda la atención de tu captura. Prueba a sacar ese foco de color del centro de la fotografía.
Si puedes, lleva encima algún objeto de colores vibrantes, como un paraguas de colores, un gorro rojo o un juguete o accesorio divertido que pueda ser el protagonista de tu sesión fotográfica.
Elige Localizaciones Inhóspitas
No cabe duda de que la nieve cambia por completo un paisaje que, a priori, podría habernos parecido aburrido. Fíjate bien en esos lugares que, aunque sin nieve podrían parecer poco fotogénicos, ahora tienen un encanto especial.
Lugares que hasta ahora has podido pasar por alto o que te han podido parecer poco interesantes como un viejo cobertizo, un árbol seco o un edificio abandonado: podrían dar el toque a tus fotografías invernales. Son espacios que, seguramente, ahora que están cubiertos por un inmaculado manto de nieve, te den la oportunidad de captar una fotografía espectacular.
Capta Emociones o Momentos
Una de las ventajas del clima invernal es que hace propicio que la gente disfrute de la nieve al máximo. Hay infinidad de actividades que son exclusivas de esta estación del año y que al ser tan esperadas por muchos supone una gran ilusión disfrutarlas.
No dejes de captar momentos como la sonrisa de un niño mientras lanza una bola de nieve o construye un muñeco con gorro y bufanda. O personas practicando algún deporte como el esquí o el snowboard, incluso un trineo deslizándose a toda velocidad.
Para poder captar tomas de acción y captar el momento justo, recuerda que puedes utilizar el modo ráfaga de tu cámara si dispones de él. Sólo tendrás que mantener pulsado el disparador mientras se sucede la escena y luego elegir la mejor captura de toda la secuencia.
¿Cuál es tu Secreto para Hacer Fotos Espectaculares en la Nieve?
Bueno ahora ya estás preparado para salir a la nieve y ponerte a captar fotografías únicas. Recuerda que es esencial que cuides muy bien tu equipo cuando salgas a realizar este tipo de fotografía y que existe el botón para compensar la exposición, que te vendrá muy pero que muy bien para este tipo de capturas.
Fuente: DZoom